TERMINAL BAHIA BLANCA

TERMINAL BAHIA BLANCA

miércoles, 5 de agosto de 2009

Manos Unidas, en busca de la justicia climática

Que el cambio climático no es sólo cosa de científicos y ecologistas está claro. Cada vez son más las voces que hablan de justicia social y lo sitúan en el meollo de la cuestión. Diciembre de 2009 es el horizonte más inmediato -y, según distintos actores, crucial- para debatir el futuro del planeta y Copenhague el escenario de lo que será una cita, en forma de cumbre mundial, colmada de expectativas.

Pero en todo este teatro han irrumpido nuevos personajes. Si hace cuatro años el Comité Español de Ayuda al Refugiado ya llamó la atención en su informe anual sobre un fenómeno in crescendo al que refirieron como el de los refugiados ambientales, ahora las voces que hablan de Justicia Climática son cada vez mayores.

Manos Unidas, ONG que cumple estos días 50 años luchando contra la pobreza y por la erradicación del hambre, ha decidido entrar en juego y, como han anunciado sus responsables en un seminario de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, presentará el próximo 6 de octubre una campaña dirigida a concienciar sobre la necesidad de atender a esa Justicia Climática. La idea, en palabras de Marcos Gordillo, responsable de campañas de la ONG, es recoger firmas -algo que ya han empezado a hacer en su página web- para presentarlas en la cita de Copenhague a la que asistirán como observadores.

El lema de la campaña es 'Siembra un clima de Justicia', y se centra en tres puntos que deberían ser "innegociables": que los gobiernos del norte reconozcan como un derecho de los pueblos del sur el derecho a un desarrollo sostenible, que se proporcione una transferencia de recursos de forma distinta que incluya una caja de adaptación específica para estos pueblos del sur así como transferencia tecnológica, y, por último, la exigencia de reducir al menos el 30% de emisiones para 2020 y del 80% para 2050.

Y todo porque consideran que, en palabras de Gordillo, "el cambio climático es antropogénico", es decir, "que tiene su origen causal en la emisión de gases de efecto invernadero". Pero sobre todo porque "el cambio climático provocado por el hombre está llevando a una injusticia mundial", especificada en que quienes menos responsabilidad tienen, aquellos países que menos gases han emitido y menos energía han consumido, son quienes más sufren las consecuencias de esos desastres naturales. Gordillo aporta datos: entre 1990 y 1998 se calcula que hubo 568 desastres naturales, el 94% de ellos tuvieron lugar en los países del sur y el 97% de las muertes que provocaron ocurrieron en esas regiones más deprimidas.

Todo esto convierte a estos países, en opinión de Manos Unidas, en los golpeados por triplicado: son los que menos gases de efecto invernadero han emitido históricamente a la atmósfera, son los que reciben más directamente el impacto del cambio climático y son los que menos tienen menos recursos de adaptación.

Eso sí, el panorama es demasiado serio como para no exigir responsabilidades a todos. Así, los países emergentes también deben empezar a mover también ficha. Es el caso de China, "uno de los países más contaminantes junto con EEUU" según Gordillo, que también reconoce que países con menor desarrollo que los emergentes son "corresponsables". Es decir, todos tienen que asumir su parte. Aunque hay ejemplos esperanzadores, como el hecho de que algunos de estos países, como es el caso de México, Brasil, India o la propia China hayan comenzado proyectos voluntarios de reducción de emisiones.
Fuente:elmundo

No hay comentarios: