TERMINAL BAHIA BLANCA

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viernes, 29 de enero de 2010

Costa Rica es tercera del mundo en conservación ambiental

Costa Rica se encuentra en el tercer lugar del mundo en el manejo de los recursos naturales y el ataque a la contaminación, de acuerdo con el Índice de Actuación Medioambiental.

Este documento es producido bianualmente por expertos de las universidades de Yale y Columbia (Estados Unidos), con información obtenida del sistema de Naciones Unidas o solicitada a cada país. La edición 2010 del índice se presentó ayer en el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza.

De acuerdo con el comunicado de prensa, este resultado demuestra que tanto Costa Rica como Islandia y Suiza han realizado “inversiones sustanciales en infraestructura ambiental, control de contaminación y políticas designadas para lograr sustentabilidad en el largo plazo”.

¿Por qué? Tras una evaluación de 25 distintos indicadores, Costa Rica obtuvo una nota de 86,4 de un máximo posible de 100.

Así, el país quedó solamente por debajo de Islandia (que obtuvo 93,5) y Suiza (89,1).

Otros países de la región latinoamericana que también obtuvieron un lugar destacado fueron Cuba (78,1), Colombia (76,8), Chile (73,3) y Panamá (71,4).

En Centroamérica, Nicaragua obtuvo un 57,1, Honduras 49,9, El Salvador 69,1 y Guatemala 54. En los últimos lugares están mayoritariamente países africanos y Haití, con una nota de 39,5.

Entre las variables estudiadas en los 163 países estuvieron la influencia del medioambiente en la salud de la población, la calidad del aire, el manejo del recurso hídrico, la biodiversidad, la pesca, la agricultura, los bosques y acciones contra el cambio climático.

Según el desglose de estos componentes, el buen lugar de Costa Rica se deriva de una nota perfecta (100) en bosques y notas muy altas en los temas de biodiversidad marina y la disponibilidad de agua.

En el rango medio de calificación se encuentran variables como emisiones de dióxido de sulfuro, calidad del agua, y emisiones de dióxido de carbono (CO 2 ).

La peor de las calificaciones, –en que Costa Rica apenas ganó 18,6 de 100 puntos posibles– se obtuvo en protección de los océanos.

Entre los puntos más negativos también se encuentran la emisión de gases, como óxidos de nitrógeno y los llamados compuestos orgánicos volátiles distintos del metano, ambos relacionados con quema de hidrocarburos.

Asimilación. Pedro León, director de la iniciativa gubernamental Paz con la Naturaleza, se mostró satisfecho por el resultado, pero aceptó que existen varios temas en que el país debe mejorar.

“Por un lado, me alegra mucho (estar en el tercer lugar mundial), pero también me doy cuenta de que no nos merecemos una nota tan alta en ciertas cosas como el tema del manejo de la basura y la contaminación de ríos”, explicó León.

Bernardo Aguilar, director ejecutivo de la Fundación Neotrópica, pidió tomar en cuenta que hay temas que este indicador no toma en cuenta al evaluar las naciones.

“Por ejemplo, las concesiones mineras, uno de los problemas más latentes hoy día en la opinión pública del país”, comentó Aguilar.

León aceptó el mal desempeño del país en algunos aspectos ambientales muy concretos.

“Costa Rica protege el 26% de su territorio físico, pero solo el 1% de su territorio marino, aquí hay un reto. Lo mismo sucede con la quema de combustibles por parte de los automóviles y la industria”, comentó León.

La Nación intentó hablar con el ministro de Ambiente, Jorge Rodríguez, pero en la oficina de prensa indicaron que no sería posible pues se encontraba de gira.

Fuente: Nación

miércoles, 20 de enero de 2010

Ofensiva ecologista contra el ministro Sebastián por el cementerio nuclear

Greenpeace, Ecologistas de Acción y Tanquem les Nuclears han acusado al ministro de Industria, Miguel Sebastián, de querer comprar a los alcaldes "con dinero público" para que acepten la puesta en marcha en sus municipios del futuro Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares.

El responsable de energía nuclear de Greenpeace, Carlos Bravo, ha arremetido en rueda de prensa contra Sebastián, a quien ha calificado de "inmoral" por tentar con "compensaciones" económicas por parte de la empresa pública ENRESA a los municipios próximos a las centrales, sin tener el "amplio consenso social y territorial" al que en su día se comprometió -ha recordado- el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.

A finales de enero acaba el plazo para que los ayuntamientos interesados en albergar este almacén nuclear -que conllevará una inversión de 700 millones de euros y la creación de entre 300 y 500 empleos- puedan presentar sus solicitudes.

Según Bravo, la Asociación de Municipios Afectados por Centrales (AMAC) y el Ministerio de Industria han llegado ya a un pacto para ofrecer al menos dos candidaturas a este almacén, en concreto las de Yebra (Guadalajara) y Ascó (Tarragona).

El presidente de Castilla-La Mancha, en contra
Hasta la fecha, sólo Yebra, a pocos kilómetros de la clausurada central de Zorita, ha mostrado su interés firme en acoger la instalación, a pesar de la postura contraria del presidente de la comunidad de Castilla La Mancha, José María Barreda, quien en los últimos días ha mantenido por ello un enfrentamiento dialéctico con su compañero de partido Miguel Sebastián.

También el alcalde de Yebra, donde el PP gobierna en mayoría, tiene la oposición de la numero dos de su partido, María Dolores de Cospedal, contraria a que ningún municipio dirigido por esta formación acepte el almacén, señala Bravo, ya que ello solucionaría la "papeleta" con la que se encuentra ahora el Gobierno.

Hasta la fecha, los residuos nucleares, activos durante miles de años, se guardan en las piscinas de las centrales o en depósitos externos, a excepción de los de Vandellós I, "exportados" a Francia tras el cierre de esta central y que deberán regresar en 2011.

En este sentido, Bravo ha dicho que esta devolución no puede ser usada para argumentar la creación del almacén, ya que éste no estaría en funcionamiento antes de cinco años, y ha advertido a los alcaldes que se postulen para albergarlo que la instalación no será temporal como afirma el gobierno, sino que "tiene muchas posibilidades" de ser un cementerio definitivo a partir del 2070.

'No es urgente'
Para el responsable de Greenpeace, no hay urgencia en la construcción del almacén, ya que la saturación de las piscinas se podrían resolver con nuevos depósitos de superficie.

Cada uno de los ocho reactores nucleares de España generan una media de 30 toneladas de combustible irradiado.

Bravo ha señalado que la solución del ATC tendrá el problema añadido del transporte de los residuos, con sus elevados costes, y de la posibilidad de accidentes, tanto en su traslado como en su manejo, y que se convertirán además en potenciales objetivos de ataques terroristas.

Para el representante de Greenpeace, el centro tecnológico asociado al ATC será únicamente una "instalación experimental nuclear" destinada a investigar técnicas de transmutación, "con los riesgos que ello conlleva"

Desde Ecologistas en Acción, Manuel Adelantado ha afirmado que todo el proceso tendría que ir acompañado por un calendario consensuado de cierre de las centrales, y ha subrayado que el objetivo del ATC es "quitarse de encima los residuos" y así poder seguir alargando la vida de los reactores que hay España.

La delegada de Greenpeace en Cataluña, Anna Rosa Martínez, ha pedido a CiU (que gobierna en la localidad de Ascó) que mantenga su apoyo a la resolución aprobada en 2008 en el Parlament, contraria a que esta comunidad acogiera el almacén y ha recordado que la creación del ATC surgió cuando el actual presidente de la Generalitat, el socialista José Montilla, era ministro de Industria.

Para el próximo viernes estas entidades han convocado una reunión con representantes municipales y vecinales de Tarragona para fijar una postura común en contra del ATC, a la que han invitado a representantes de todos los partidos políticos.

El petróleo de Exxon Valdez sigue ensuciando Alaska 21 años después del vertido

La combinación de bajas concentraciones de oxígeno y nutrientes en las capas inferiores de las playas del fiordo del Príncipe Guillermo, en Alaska, está ralentizando la biodegradación aeróbica de los restos de crudo acumulado como resultado del naufragio en 1989 del superpetrolero Exxon Valdez, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de Temple.

Considerado uno de los peores desastres medioambientales de todos los tiempos, el naufragio del Exxon Valdez vertió más de 41.000 toneladas de crudo en esa zona, contaminando más de 2.000 kilómetros de línea costera, matando miles de animales salvajes y afectando seriamente a la industria pesquera y la economía de Alaska.

En los primeros cinco años tras el accidente, que se produjo el 24 de marzo de 1989, el petróleo desapareció hasta en un 70% y los cálculos mostraron que se disolvió por completo en unos cuantos años más. Sin embargo, hace siete u ocho años se descubrió que este crudo se había limitado a disolverse a una tasa de un 4% anual y se estimó que unas 76 toneladas seguían diseminadas por las costas afectadas.

Los investigadores, dirigidos por Michael Boufadel, director del Centro de Desarrollo de Recursos Naturales y Protección del Colegio de Ingeniería de la Universidad de Temple estudiaron la causa de esta evolución durante los últimos tres años. Su estudio se publica en la última actualización de la edición digital de 'Nature Geoscience'.

Las playas tenían dos capas
Boufadel declaró que las playas que estudiaron presentaban dos capas: uno superior muy permeable y otro inferior que se había mantenido poco permeable. En promedio, el agua discurría mil veces más deprisa en la capa superior que la inferior, y aunque ambas capas estaban formadas por los mismos materiales, la inferior se había hecho más compacta a través del movimiento de las mareas.

Estas condiciones han creado una especie de efecto de preservación del petróleo, que a menudo se mantiene a sólo unos centímetros por debajo de la separación entre ambas capas.

Boufadel explica que el oxígeno y los nutrientes son necesarios para la supervivencia de microorganismos que se alimentan del crudo y colaboran en su biodegradación. Pero sin las concentraciones apropiadas de nutrientes y oxígeno debidas al bajo movimiento de agua, la biodegradación que se esté produciendo probablemente sea anaeróbica, que habitualmente es muy lenta.

fUENTE: ELMUNDO